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Las drogas: una realidad presente

Abordando las drogas: prevención y reducción de daños para un futuro responsable

Las drogas o sustancias psicoactivas son diversos compuestos naturales o sintéticos que al ser introducidos en el organismo puede alterar de algún modo el Sistema Nervioso Central, Organización Mundial de la Salud (OMS), generando modificaciones en el estado de conciencia, de pensamiento, de estados de ánimo y funciones motoras. Si bien algunas son de uso legal y medicinal, otras generan un impacto negativo en la salud individual y colectiva.

Según los efectos que generan en nuestro Sistema Nervioso Central, las drogas se pueden clasificar en los siguientes grupos:

  • Estimulantes: Cocaína, anfetaminas, cafeína.
  • Alucinógenas: Marihuana, hongos alucinógenos, LSD, LSA
  • Depresoras: Alcohol, heroína, fentanilo y sus derivados, tranquilizantes, barbitúricos.

Los trastornos causados por el uso de drogas son una pesada carga para los individuos y las comunidades. El uso continuo de drogas puede causar dependencia y discapacidad además de problemas crónicos de salud. Las consecuencias sociales del uso perjudicial o dependencia de drogas llegan mucho más allá del usuario y afectan a sus familias y a otras relaciones personales

Mas allá de la prohibición:

La lucha contra las drogas no se limita a la prohibición. Dos estrategias fundamentales convergen para construir un futuro responsable: la prevención y la reducción de daños.

  1. Prevención: evitar el uso desde la prevención las semillas del autocuidado
  • Información: Brindar información veraz y objetiva sobre las drogas y sus efectos a infancias y juventudes.
  • Habilidades: Desarrollar habilidades para la toma de decisiones responsables, el manejo de emociones y la resolución de conflictos.
  • Autoestima: Fortalecer la autoestima y la confianza en sí mismos.
  • Valores: Fomentar valores como la responsabilidad, el respeto y la solidaridad.
  • Comunicación: Promover una comunicación abierta y honesta sobre las drogas en el entorno familiar y social.
  • Apoyo: Ofrecer apoyo y contención a las personas que experimentan dificultades con las drogas.
  • Entornos saludables: Crear entornos seguros y libres de drogas.

    2. Reducción de daños: responsabilidad individual y apoyo social

    • Información: Brindar información sobre los riesgos asociados al consumo de drogas.
    • Prácticas seguras: Fomentar prácticas de consumo más seguras.
    • Acceso a tratamiento: Facilitar el acceso a tratamiento y apoyo para las personas con problemas de adicción.
    • Programas de tratamiento: Ofrecer tratamiento y apoyo psicológico y social.

    Responsabilidad individual y colectiva:

    La responsabilidad individual en el ejercicio de la libertad es fundamental. Sin embargo, la sociedad tiene la responsabilidad de brindar las herramientas y el apoyo necesarios para la toma de decisiones responsables. Juntos podemos construir una sociedad más responsable y resiliente frente al consumo de drogas.

    Construyendo un futuro responsable:

    La prevención y la reducción de daños no son estrategias antagónicas, sino que se complementan para construir un futuro donde las personas puedan tomar decisiones responsables sobre su salud y bienestar.

    Si crees que tú, un amigo o familiar pueden ser adictos a las drogas, no dudes en pedir ayuda. Busca el apoyo de una persona de confianza, tu médico o un terapeuta profesional. Ellos te brindarán la orientación y el tratamiento necesario.

    En México, puedes llamar al Centro de Atención Ciudadana contra las Adicciones al 018009112000 donde te ofrecerán asesoría especializada de manera gratuita y confidencial las 24 horas los 365 días del año a través de una llamada telefónica.

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    El alcohol y sus efectos en la salud

    ¿Sabías que en México, el consumo de alcohol se caracteriza por ser excesivo, es decir, se consumen grandes cantidades en periodos cortos, principalmente los fines de semana? Esta forma de beber se asocia con una proporción importante de problemas. Conocer los efectos es vital para tomar decisiones responsables sobre su consumo.

    Alcohol es el nombre común que se da al etanol, que también se llama alcohol etílico. Es una sustancia química que se encuentra en las bebidas alcohólicas, como la cerveza, el vino y las bebidas destiladas (licor). Es una droga depresora del Sistema Nervioso Central, es decir, hace más lenta la actividad cerebral, y provoca dependencia.

    En este artículo, abordaremos los efectos del alcohol en la salud, tanto a corto como a largo plazo, y brindaremos recomendaciones para un consumo responsable.

    Efectos del consumo de alcohol

    Efectos a corto plazo:

    • Euforia y desinhibición: Afecta la capacidad de autocontrol. El consumo de alcohol produce inicialmente una sensación de euforia y desinhibición, por lo que puede confundirse con un estimulante. 
    • Deterioro del juicio y la coordinación: El alcohol puede afectar la capacidad de pensar con claridad y coordinar los movimientos. Se considera que el 40-50% de los accidentes de tráfico, está relacionado con el consumo de alcohol.
    • Náuseas y vómitos: El consumo excesivo de alcohol puede provocar náuseas y vómitos.
    • Pérdida de memoria: El alcohol puede afectar la memoria a corto plazo.
    • Agresividad: El abuso de bebidas alcohólicas y alcoholismo incluye conducta violenta que se ve reflejada principalmente como violencia familiar.

    Efectos a largo plazo:

    • Enfermedades del hígado: El consumo excesivo de alcohol puede causar daños en el hígado, como cirrosis y hepatitis.
    • Enfermedades del corazón: El consumo excesivo de alcohol puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades del corazón, como presión arterial alta y accidente cerebrovascular.
    • Cáncer: El consumo de cantidades moderadas o grandes de alcohol puede aumentar el riesgo de ciertos tipos de cáncer, como el cáncer de boca, garganta, esófago, mama, hígado, colon y recto. 
    • Problemas de salud mental: El consumo excesivo de alcohol puede aumentar el riesgo de sufrir trastornos mentales, alimenticios y de la conducta, 
    • Dependencia del alcohol: El consumo regular de alcohol puede llevar al alcoholismo, síndrome de dependencia o adicción al alcohol etílico; enfermedad crónica por la que una persona siente deseo de tomar bebidas alcohólicas y no puede controlar ese deseo.

    Su consumo nocivo también puede perjudicar a otras personas, por ejemplo a familiares, amigos, compañeros de trabajo, e incluso, a desconocidos.

    Recomendaciones para un consumo responsable:

    • Limita la cantidad de alcohol que consumes: Se recomienda que las personas que beban alcohol lo hagan en moderación: 2 o menos tragos al día para los hombres; 1 trago o menos al día para las mujeres. Para contabilizar la cantidad de alcohol que se consume, existe una herramienta llamada “Trago Estándar”. Un trago estándar equivale a 13 gramos que equivale a 16 ml de alcohol puro:
      • una copa con vino de (120 ml); 
      • una lata con cerveza (355 ml);
      • un caballito de algún destilado (45 ml).
    • Evita beber en ayunas: Come antes o mientras consumes alcohol.
    • No conduzcas si has bebido alcohol: El alcohol afecta tu capacidad de conducir de forma segura.

    El consumo de alcohol puede tener efectos negativos en la salud tanto a corto como a largo plazo. Es importante ser consciente de estos riesgos y, en caso de consumir alcohol, hacerlo responsablemente. Si tienes problemas con el alcohol, busca ayuda profesional. Existen muchos recursos disponibles para ayudarte a superar la dependencia del alcohol.

    Referencias:

    https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/alcohol
    https://www.cancer.gov/espanol/cancer/causas-prevencion/riesgo/alcohol/hoja-informativa-alcohol
    El trago estándar en México: Una herramienta para la prevención del uso nocivo del alcohol.
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    ¿Por qué son importantes las áreas donde se prohíbe fumar?

    La única manera de proveer protección contra el humo de tabaco ajeno (HTA)  es el hacer que todos los ambientes cerrados (y en algunos casos, los ambientes externos) sean 100% libres de humo de tabaco.

    A nivel mundial, el tabaquismo constituye uno de los principales problemas de salud pública. El tabaco es actualmente la principal causa de muerte evitable en el mundo y es el principal factor de riesgo para las enfermedades no transmisibles (ENT), entre las que se incluyen enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y enfermedades respiratorias crónicas.

    Escritorio de oficina con computadora en colores claros bajo luz de la mañana. Símbolo circular de no fumar sobrepuesto sobre la imagen.

    Los efectos negativos que produce el tabaco en la salud, no sólo afectan a los fumadores sino también a aquellos que están expuestos al humo de segunda mano o humo de tabaco ajeno (HTA) , también llamados fumadores pasivos.

    En los últimos años, diversos países y ciudades del mundo han implementado leyes antitabaco que prohíben fumar en ambientes cerrados, lugares públicos y lugares de trabajo, que han tenido un impacto positivo en la salud de las poblaciones donde se han aplicado. Actualmente, 25 de las 100 ciudades más grandes del mundo son libres de humo de tabaco. Entre ellas están  Ciudad de México, Sao Paulo, Nueva York, Toronto, Bogotá y Río de Janeiro. 

    En la actualidad existen protocolos para proteger la salud de los fumadores y los no fumadores de la exposición al humo de tabaco. Esto ayuda en particular a los niños, cuyos pulmones todavía se están desarrollando y pueden ser afectados por la exposición al humo. Es por ello que en la mayoría de los inmuebles, sitios de trabajo y espacios públicos, incluidos restaurantes y bares se designan áreas libres de humo donde se prohíbe fumar.  

    Mayor información: Protocolo de Reconocimiento a Espacios 100% Libres de Humo de Tabaco.